Monday, November 29, 2010

Esto no es una crítica

Se toman de las manos con fuerza y ruedan por aquí o por allá también. Se revelan. No clothes on. Y el sudor que empapa sus trajes de piel. A ellos no los criaron así. Colegio de monjas, de curas, de pedófilos, de deseo acorralado por imágenes de vírgenes lloronas. Encarcelándoles su fuente de deseo y poder, con un candado más grande que sus mentiras. Baila el reloj y un chasquido de dedos que se escapa, una luz roja intermitente con una sirena que avisa que ya, que ya está. Fuegos artificiales o bombas o revólveres gastados en un mar de parafina. No. Clothes. On. Bro. Y sus manitos despejadas que recorren sus propios valles, mundos, universos de galaxias lujuriosas tan llenos de ese amor y de esa paz de la que hablaba un tal Ghandi. Quizá él no lo quería de esta manera pero ellos estarían gritando que ésto es su propia revolución. O quizá no. Quizá no les importa. Secretamente se condecora el poder de la mente, sus mentes tan pequeñitas pero tan puras, tan hartas, enfermas. Que confunden el mar con el cielo. Confunden a los pájaros con los insectos. Culpen a Freud, o a ese otro. Ése que algunos le dicen Dios y al sexto día puso un laberinto sin final en las cabezas de sus criaturas estrellas. Se siente en el aire, el que está lleno de calor de sus pulmones (que están como al ladito del corazón). Que se encuentren no más digo yo, que lleguen al final de lo que empezaron. Deformando sus ojos en conjunto con sus párpados, muting todo lo que está demás. Para después finalizar el lapsus psicodélico con gritos fuertes, los más fuertes y se pongan sus telas revolucionarias anti-cristo-monja-folla-monja. ¡QUE MARÍA ERA LESBIANA Y BIEN PUTA TAMBIÉN!. Pero tranquilos, porque aún después de haber ultrajado virginidades van a temerle en secreto al compadre J. Porque sus voces del pasado lo dictan así, y esas no se borran. No al menos de sus mentes vacías (pero ojo que están llenas de amor y de paz y de amor y de paz). Bésense con pupilas rítmicas que aquí no pasó nada. Brazos, lenguas, que se entrelazan, se confabulan para sellar la locura de hoy. Que vuelvan a sus camas deshechas y que despierten mañana con un letrero en la frente, que diga bien grande, no me importa. Con la moral esposada y golpeada dentro de una bolsa para vómitos cuál criminal. Eso es lo que falta, they say. Mariposas en vez de esas palomas vírgenes, blancas pero no tanto, blancas pero con mugre. De autodestrucción se trata, o destrucción. O lo que sea, no importa.

3 comments:

Anonymous said...

hermoso, como tus manos que escriben puras bellezas y hueas tambien, pero lindas :)

Javiera said...

jajajaja más hueás diría yo

Ara Arias said...

conchetumare está muy bacán
"ellos no los criaron así. Colegio de monjas, de curas, de pedófilos, de deseo acorralado por imágenes de vírgenes lloronas"
mi parte favorita entre otras
te quieor mai ló